Cuando viajamos, nos llama enormemente la atención esos rótulos luminosos y gigantografías que invaden las calles. Muchas de las empresas que se publicitan, no están en nuestra ciudad, y anhelamos tenerlas cerca. Nos llama la atención la creatividad y el diseño que plasman estos rótulos gigantes. Quizás sea una de las cosas que recordaremos cuando volvamos.
Hay algunas que tienen una excelente originalidad:
Hay gigantografías que forman parte del paisaje urbano, en muchas ocasiones sirven de referencia para los turistas e incluso para los propios ciudadanos de la ciudad. Se trata de una referencia más en la ciudad, con la que orientarnos. Quizás si un día desaparecieran, nos encontraríamos desubicados o al menos notaríamos un vacío en el paisaje.
La gigantografía tienen múltiples ventajas, desde incorporarla como fachada de la empresa, generando una imagen muy activa y actual de esta, pudiendo cambiarla cuando deseemos transmitir algo distinto o novedoso. O incorporarla en cualquier zona de la ciudad, aprovechando la afluencia de gente que se genera en algunos puntos de la ciudad. Este punto es muy importante, ya que al ser una publicidad permanente, contra mayor tráfico mas posibilidades de venta. En cualquiera de los dos casos, conseguiremos captar la atención de la gente, gracias a su gran visibilidad.
Las gigantografías que vemos habitualmente tienen un objetivo distinto según el planteamiento de cada empresa, algunas simplemente desean informar, quizás hayan generado algún cambio en sus productos y deseen hacernos llegar a todos estas modificaciones. En otros casos tratan de persuadir, lo que consideramos como la publicidad pura, en la que la venta es el único fin, y por último hay quien solo desea recordar un producto, y simplemente quieran reforzar una campaña.
Los precios de las gigantografías son mucho más asequibles de lo que la gente piensa. En Rotulowcost, disponemos de precios muy competitivos con los que plasmar nuestra idea o marca en el paisaje urbano. Los rótulos gigantes, tienen un potencial muy alto, si acertamos en nuestro mensaje.
16/09/2013 by Pepe Llabrés